El pedigree es algo interesante… A esta altura del partido uno imagina que empresas como Omega Force, enfocada casi netamente a Dynasty Warriors no se daría el lujo de trabajar en otro IP al menos próximamente. Por otra parte, cualquier juego de este equipo dentro de Tecmo Koei plantea el siguiente problema: al jugarlo ¿tendremos en cuenta que son los desarrolladores de Dynasty Warriors? Este escenario es sin dudas un arma de doble filo, por que de ser exitoso le da seguridad al consumidor y a la empresa, y fallando el acto contrario. A continuación leerán la review de un juego que se aparta bastante de lo que es esa mítica franquicia, pero no así del género. Tras el corte el análisis completo.
Toukiden cuenta la original historia de como el mundo está en crisis y los únicos que pueden hacer algo es el bando de los “buenos”. Por supuesto, encarnamos el cliché de “el (o la) elegido/a”. Un personaje más de esta historia, pero que realmente nunca fue uno más, sino que era el más importante de todos. La naturaleza trillada de la historia hace que sea olvidable en todo sentido, pero a diferencia de juegos como Monster Hunter, te lleva a tratar de saber que que pasó. Nuestro personaje es el nuevo recluta de los Slayers, una sociedad encargada de erradicar la amenaza Oni, y eso lo lleva a una aldea, a uno de los últimos bastiones antes de que la invasión enemiga de Onis llegué a lo que sería la base madre de los Slayers, y rápidamente nos enteramos que del pedido que la aldea realizó para protegerse sólo llego una única persona. Ya en la segunda misión del juego nos enteramos que somos especiales y es de esta forma que el juego va tirando cliché sobre cliché. ¿Hay un monstruo jefe que destruyó la aldea enemiga de uno de nuestros compañeros? Bien, pelearemos verbalmente con ellos, se distanciarán y se encapricharán a pelear solos. Por supuesto corremos detrás de ellos, y luego la pelea es grupal. Lamentablemente, nunca hay un giro inesperado y el resultado final es el que te esperás sobre el principio, así que es un juego que básicamente se lleva por su jugabilidad.
Al igual que Soul Sacrifice, que Ragnarok Odyssey o mismo que los Monster Hunters, el juego está seccionado. Tenemos una base donde podemos seleccionar nuestro equipamiento, descansar, salvar y luego y casi siempre a través de un personaje lanzar una misión que consta de eliminar ciertos enemigos. La formula es la de siempre: arrancamos con misiones de enemigos chicos, nos enseñarán a movernos, a usar los poderes especiales, en definitiva un tutorial disfrazado de misión. Luego el juego va creciendo, los enemigos pequeños se van haciendo más poderosos, los jefes empiezan a abundar y el juego escala progresivamente. Cómo comentábamos, la historia, por más trillada que sea está contada de cierta forma que hace que a veces juguemos una o dos misiones más para saber a dónde vamos. La aldea por la que nos movemos tiene 7 partes fácilmente distinguibles. Un mercado, donde compraremos armas y recursos para hacer armas, y por supuesto el vendedor que te cambia recursos más dinero, por armas. Las armas del mercado evolucionan de forma lenta y la realidad es que el Crafting (el sistema de armado de armaduras y armas) no es excesivamente difícil de llevar. Tenemos una casa, donde podemos enviar a un Tenko (una mascota) a buscar recursos a uno de los mapas previamente visitados, también podremos chequear mensajes, nuestras armas y recursos y finalmente, salvar. Luego tendremos el área de oración donde podremos arrojar dinero a una caja de oración y esto nos dará una bendición (generalmente es más ataque, defensa, etc). Por otra parte, también le podemos rezar a otros dioses, particularmente a un árbol, el cual alimentaremos con dinero, su recompensa es items (recursos) raros. La quinta area a visitar es el baño público, que por un ticket de baño (item extrañamente raro de conseguir) nos dará una bendición (una adicional si ya habíamos rezado en la caja). Ya casi llegamos al final y tenemos la extraña medium que maneja las Mitamas, de las cuales ya hablaremos y finalmente un individuo que lleva registros y datos adicionales.
La realidad es que Toukiden: Age of Demons es un gran juego si te gusta el género. Visualmente es lo que podemos llegar a esperar del estudio que hace Dynasty Warriors, con lo bueno y lo malo que eso conlleva. Sinceramente el espacio que Monster Hunter (aparentemente) nunca va a cubrir en PlayStation Vita tiene tres competidores, y de ellos sólo Soul Sacrifice y este tiene posibilidades de acercarsele, pero ambos siguen lejos. Que decir… recomendar o no. Bueno, esto es simple: Si aprecian el género, por supuesto que es una compra segura, pero lejos de eso a los que nunca han gustado de este estilo de juego. En nada innova y en nada falla por lo que se le hace muy difícil escaparsele del resto.